martes, 20 de septiembre de 2011

MI CASA AZUL


Nuevo Año, empezamos en septiembre del 2011 y seguiremos hasta julio del 2012.

Este año tenemos nuevas caras, nuevos textos y las muchas sorpresas que nos dará cada uno.

Hemos empezado con la lectura de MI CASA AZUL, un bellísimo libro de Alain Serres y Edmée Cannard de Editorial Kókinos. Un fabuloso viaje a través del Universo pasando por nuestro pequeño planeta azul, los tesoros de sus continentes, sus países, sus cuidades y la casa de un niño de la Tierra que mira el mundo y sueña.

Luego hemos jugado con algunas preguntas como ¿A qué huelen los retos de mamá? o ¿Quién vive en la lluvia o el algodón de azúcar?, y después hemos escrito. Aquí están los textos.

Mi árbol Juanito

Dante Emiliano Cornejo Jácome

11 años

Había una vez un árbol chiquitito que era mi árbol favorito, y su nombre era Juanito, era mi árbol favorito. Cuando cumplí 6 añitos me dieron a Juanito y lo cuidé, lo respeté y lo amé a mi árbol favorito.

Es Juanito tan bonito, es mi árbol tan bonito, es un árbol chiquitito y su nombre es Juanito. Desde los 6 tengo a Juanito, ahora Juanito tiene muchos amigos; una pajarita que se llama Clarita y una ardillita que se llama Lunita.

Tu eres mi mejor amigo, eres como un hermano para mi Juanito, tu eres mi mejor amigo, cuánto te quiero tu eres mi viejo amigo, tu eres mi acompañante, te protegeré, porque te quiero Juanito y te protegeré por ser mi amigo. La lluvia te alimentará y el sol te sonreirá porque tú eres mi mejor amigo, yo te protegeré con mi alma.

Yo te protegeré, yo te quiero, nunca te dejare jamás en la corta o larga vida que tal vez tendré, nunca te cortaré ni dejaré que te corten buen amigo siempre estaré contigo.

Yo te hice un retrato.

Un retrato que muestra tu belleza. Yo te amo como el hermano que nunca tuve jamás en la vida. Juanito te hago una promesa yo siempre te amaré como una abeja a la miel, como una mosca a la pared. Te quiero Juanito, te quiero tanto que un día escribí esto para ti.

Yo te amo como una estrella a la luna, tu eres mi luna y yo soy tu estrella. Tú eres mi luna lunera y yo soy tu estrella fugaz, yo te doy agua porque te quiero. Perdón por no acompañarte las frías noches y en las dulces mañanas, el sol y sus brisas demuestran el amor que yo te tengo desde hace 5 años y te digo que te amo con mi alma. Yo estoy para ti y tu estás para mí.

Bueno no tengo más palabras para decir más que te quiero mi dulce arbolito.


sábado, 16 de julio de 2011

MAÑANA DE HADAS


Esta semana la dedicamos a las hadas y revisamos y leímos algunos libros sobre estos maravillosos seres. El gran libro de las hadas de Denise Despeyroux, En busca de las hadas, La magia de las hadas flores de Cicely Mary Barker.
Conversamos sobre los libros que leímos y luego hicimos un ejercicio de escritura automática.

¡Es un hada!

 Alejandra Rivadeneira

 

—Mamá! Aquí hay un bicho grande y feo —gritó Cathy

Su mamá subió desesperada las gradas dispuesta a matar al bicho grande y feo, pero cuando entró en el cuarto de su hija no vio absolutamente nada.

 —Dónde esta el bicho grande y feo, Cathy? —preguntó.

—Aquí —respondió Cathy señalando al aire.

Su mamá se acercó a ella, le tocó la frente, el cuello y las mejillas.

—Fiebre! —exclamó dentro de un rato y salió corriendo a llamar al doctor.

En cuanto su mamá salió del cuarto, Cathy vio que el bicho se había escondido debajo de la cama. Se  armó de valor y una pequeña caja y se metió allí abajo. Entonces vio un hermoso resplandor. Allí, debajo de la cama, pudo ver al “bicho grande y feo”. Y llegó a  la conclusión de que no era un bicho sino un hada, pero no una, sino cientos de ellas.

Cathy, en vez de alegrarse, pensar que se haría millonaria si las vendía al museo o querer adoptarlas, solo pensó en gritar y eso fue lo que hizo. Es más, las hadas también lo hacían. 

Entonces su mamá volvió a entrar en el cuarto y cuando vio a su hija, metida bajo la cama, gritando con todas sus fuerzas, la jaló de los pies que quedaron fuera y le dijo:

—Cathy! Como se te ocurre hacer eso. ¿Meterte bajo la cama cuando estás enferma? Además eres alérgica al polvo. Quiero que te metas en la cama y no salgas de ahí.

Cathy  se metió en la cama y cuando su mamá salió del cuarto las hadas también, dispuestas a encontrar otro escondite. Cathy abrió desesperada la ventana y todas las hadas se fueron…

Y en ese momento llegó el doctor. Examinó a Cathy de pies a cabeza y no le encontró ninguna fiebre. Le dijo a su mamá que su hija no tenía nada y se fue.

La mamá de Cathy  pensó que tal vez era ella la que tenía fiebre, o se estaba volviendo loca y ya no podía ver los bichos grandes y feos.

 

 

 

 

DOS PAJARITOS

Esta semana trabajamos con el libro DOS PAJARITOS del ilustrador colombiano Dipacho. Comentamos cada una de las ilustraciones y el contenido del libro ligado al consumismo y a la adquisición de cosas innecesarias.


Dos pajaritos

 Alejandra Rivadeneira

 

—Entonces este es mi lado del  árbol y ese es el tuyo —dijo el pajarito negro
—¡Hecho! —contestó el blanco.
Un día el pajarito blanco llegó con una lámpara. Realmente él no sabía para que servía y como funcionaba, pero le gustaba. Entonces el pajarito negro fue a buscar algo más para mostrar al pajarito blanco.
Los dos, al ver que el otro pajarito podía tener más cosas que él fueron en busca de nuevos objetos. Una lavadora, un inodoro, una hamaca, y un montón de otras cosas que para un pajarito no tenían utilidad.
Además, cada pajarito quería mostrarle al otro que sabía para que se usaba cada artefacto. El pajarito negro daba vueltas en la lavadora y el pajarito blanco hacía equilibrio en un monociclo.
De repente el árbol comenzó a crujir.
—Creo que tu lavadora pesa mucho —dijo el pajarito blanco en tono de regaño
—¿Y qué me dices de tu mesa de  ping pong? —gruñó el pajarito negro.
De pronto todo el árbol se vino abajo y el pajarito negro, disimulando como si no le importara, dijo:
—Este sigue siendo mi lado del árbol…

Pero luego de unos momentos ambos entraron en llanto y después de mucho llorar ambos cayeron dormidos sobre su montón de cosas dispuestos a esperar los 150 años que tardaba en crecer el árbol.


Dos pajaritos

Valentina Poveda

Dos pajaritos estaban sentados sobre su árbol, aburridos. De repente, uno tuvo una idea. Fue volando hacia una casa y encontró un objeto extraño. Al saltar sobre una especie de piedra tenía el color del sol. Se lo llevó hasta el árbol y le dijo al otro:

-¡A que no me ganas con este mini-sol!

El otro, sin pensarlo más, salió a buscar algo mejor. Encontró algo con signos humanos y una forma parecida a la de su pico. ¡Perfecto! Lo llevó al árbol y espero a que el otro  se muriera de envidia.

En lugar de esto, salió a buscar otra cosa. ¿Y él qué esperaba?, También se fue. El uno llevó algo plano con un cordón. El otro llevó algo muy grande con muchos cordones. Bueno, si él quería competencia, la tendría. Uno llevó una de esas fuentes de agua en las que se aseaban los Domésticos., un objeto suave, un envase con líquido rojo dentro, una piedra plana y delgada, una cosa similar a una rama, un humano pequeño y estático… El otro llevó un objeto suave y largo (pudo reconocer que tenía las plumas de su tío Alberto,) una especie de omni, (objeto en movimiento no identificado,) una piedra blanca y negra, un envase en forma de tronco hueco lleno de semillas de diferentes formas, una cosa casi del tamaño del omni, una fuente de aguas turbulentas…

Nadie pudo parar a los dos pajaritos, excepto su hogar destruido. Tan grande fue el peso de cosas que las ramas del árbol se quebraron, llevando las cosas y a los dos pajaritos al piso.

Todo se rompió. Tras recuperarse un rato, los dos subieron a su árbol y se prometieron no volver a hacerlo… Aunque ni siquiera hubieran podido, pues apenas entraban ellos en la pequeña parte de rama que quedó.

  

MASCOTAS INVENTADAS

Este día en el taller leímos Maíces del silencio de María Cristina Ramos, Poesía sobre animales de Carlos Juárez y Las Grandes Mascotas de Lane Smith.

La consigna fue crear una mascota fantástica y luego una historia sobre la misma.


Clase de mascotas inventadas     

Por: Valentina Poveda

Nombre: Pollus Peludo

Color: En el Oriente turquesa, en zonas altas rojo, en zonas bajas negro, en el norte verde y en el sur multicolores.

Peso: De 35 a 45 gramos.

Estatura: De 30 a 60cm.

Hábitat: Selvas, nevados, quebradas, bajo árboles centenarios y parques con margaritas.

Características: Es una especie de pollo que no tiene plumas, tiene el olfato de un perro, se alimenta de ramas, pétalos de flores de buen olor, pelo de cabra montés y elfos que viven en las quebradas.

UNA MASCOTA VERDE

Todos los alumnos queríamos inscribirnos en ¨Proyecto Huerta¨, porque allí se siembra todo tipo de plantas y la última clase siempre hay pastel de chocolate. Por mala suerte solo quedaban dos cupos. Me inscribí a toda prisa. ¡Sí! Lo había logrado. La cuota era de quince dólares. (Cinco por el pastel y diez para las semillas.)

Quise sembrar margaritas. Al final del curso ya estaban suficientemente grandes como para cortarlas. Saqué algunas y formé un ramo con ellas. Lo llevé en mi mano hasta la casa y las iba a colocar en un florero. Pero apenas llegué, encontré un pollo peludo verde comiéndose hasta el último pétalo de mis margaritas. Me asusté, lo saqué y lo tiré por la ventana. A la hora de la cena volvió y se comió lo que quedaba, que no era más que medio pétalo. Alzó la cabeza y la movió en todas direcciones. Esta vez él saltó por la ventana y empezó a picotear las ramas de nuestro árbol. Pasó allí toda la noche.

A la mañana siguiente, lo encontré comiéndose las ramas. Si papá se enteraba de eso, me haría plantar otro y otro árbol por cada rama faltante. No, no señor. Lo saqué de allí y lo lancé con todas mis fuerzas a la casa de al lado. Oí el chillido de una señora que a su vez lanzó el pollo a la casa de al lado. En esta ocasión lo acogieron muy bien, hasta le pusieron ropa de una muñeca, aunque no parecía muy a gusto dentro de ella. Empezó a comerse las ramas de un gran árbol. Luego se comió todas las margaritas. Los mayores se enojaron, mientras un niño salía corriendo con él. Entonces comenzó a lanzar al pollo cada vez más alto, hasta que lo tiró hacia la calle. Yo lo miraba desde la ventana. Antes de caer y de ser atropellado, regresó su mirada hacia mí. Me dio mucha pena. Entonces no esperé el elevador, bajé todas las gradas de tres en tres desde el sexto piso y rápidamente lo cogí y me aparté de la calle con el pollo en brazos.

Desde entonces lo cuido, no lo dejo salir al patio y todos los años hago lo posible por entrar a ¨Proyecto Huerta¨.


¡LO ENVIÉ POR EL RETRETE!

ALEJANDRA RIVADENEIRA

 

Ese día estaba jugando a las escondidas con mis primos. Me había escondido detrás de la puerta del  baño. De pronto mi primo abrió y cerró la puerta dándome en la cara. Cuando se dio cuenta, abrió la puerta y yo pude salir. Me sentía mareada. Intenté  dar unos pasos pero caí en el inodoro. Por alguna extraña razón que aún no conozco mi hice chiquita y me fui por el WC. Recorrí algunos lugares y cuando estaba a punto de ahogarme caí en una jaula llena de aserrín. Al lado mío estaba un gran hámster (bueno yo era enana, por eso el hámster era enorme)

Salí por  entre los barrotes y  apenas toqué el piso volví a ser de mi tamaño. Entonces me di cuenta de que estaba en el sótano de la casa del vecino.

Decidí que era hora de irme de ahí, pero me había gustado tanto el hámster que decidí raptarlo.

Cuando volví a casa escondí el hámster en mi habitación pues no me dejaban tener mascotas en casa y seguí jugando con mis primos que aún no se habían ido.

Cuando cayó la noche, mis padres estaban dormidos y ya todo el mundo se había ido, abrí la jaula del hámster. De ella salió volando el hámster que me atacó mordiéndome la oreja.

Corrí hacia él con un cuchillo de plástico, pero él fue más rápido que yo, me dio una cachetada con sus patitas y salió volando. Lo busqué y cuando lo alcancé, descubrí que se había comido todo el queso de la casa. Cuando me vio salió volando otra vez.

Subió las escaleras y entró al cuarto de mi hermano, quiso morderle la nariz pero lamentablemente, esta vez yo fui más rápida que él: cogí  una gran guitarra de su colección y ataqué al hámster, dándole en la cara a mi hermano, que comenzó a sangrar por la nariz. El hámster estaba en shock y decidí que era el momento de actuar.

Corrí al baño y  cogí dos bolitas de papel y los guantes para lavar el inodoro, regresé al cuarto de mi hermano, le puse las dos bolitas de  papel en la nariz, me puse los guantes por si él antes despertaba, lo cogí, lo llevé al baño y luego lo regresé a su hogar: ¡LO ENVIÉPOR EL RETRETE!

Palabras en idiomas inventados

Esta semana leímos el libro PAMPLINAS (Henry P) de Jon Scieszka y Lane Smith. La consigna fue escribir una historia en la que los niños crearan palabras nuevas de un idioma inventado por ellos, tal como hizo Henry P en la historia.


UNA BUENA EXCUSA  

VALENTINA POVEDA

-Señor perro; usted ha llegado al quinto de seis niveles del idioma español. Es el momento de que vaya a una casa de humanos. Su destino es la casa de la familia Andrade. Por favor no haga allí mucho lío, que ya hay suficiente en aquella casa. Estará allí por un mes. Vaya a empacar sus cosas.

-¡Sí, señora Yoséalemánchinoinglésidiomaperroytambiénidio-

  magato!                       

Él empacó sus cosas rápidamente y fue directo a la casa de la familia Andrade. Pero en medio camino un policía se le acercó y le dijo:

-¡Alto! ¡Está caminando por el carril gatoypájaro y usted debería caminar por el carril perroyhámster! ¡Ahora, o paga una multa, o me dice algo realmente convincente para que lo deje pasar sin problemas!

-Verá… lo que pasó fue que iba a la casa de la familia Andrade, pero recordé que olvidé mi wauwaueta en casa de Wausina, mi wauía.

Toqué el wimbre tres veces y no me abrió nadie la puerta. Entonces la wausé y se rompió, pero pude pasar wufmente. Me di cuenta de que Wausina no estaba, pero sus wufwaunos me vieron y creyeron que quería wauwuar. Entonces se abalanzaron sobre mí y me enviaron a la waufcel sin razón. Yo escapé diciendo al wufwuafwuadia que había un incendio cerca de la waufcel. Entonces él salió wufendo, a tratar de auxiliar en el supuesto incendio. Más tarde, él volvió algo wauscado. Realmente hubo un incendio. Pero yo ya no estaba allí, porque escapé por un wauwuero que había al lado derecho de donde me encontraba. Entonces me buscó y me buscó hasta que me encontró. Yo wauí  y vine wufendo.

Pero vino una waca wufca que se escapó del wufero y me quería comer.

Entonces mi única waufida fue venir, a este carril, porque el otro estaba wufgueante y quería escapar pronto de esa waca. Por eso vine aquí. ¡Gracias por dejarme pasar! ¡Adiós!

El señor perro fue corriendo a casa de los Andrade. Allí le esperaba una enojada cara dispuesta a gritarle: ¿En dónde has estado?

ODIO LOS IDIOMAS

Alejandra Rivadeneira

 

-Hola, soy Chiqui y he venido aquí en representación de la A.O.I o sea, animales que odian los idiomas. Tenemos un pequeño gran problema: nosotros los perros, usamos palabras que en nuestro idioma no son nada ofensivas, pero en los de otros animales son las peores palabras. Bueno a veces no son malas pero combinadas con el resto de la oración tienen significados terribles, por ejemplo: el otro día regresaba a casa muy feliz cantando pieli de limón que en mi idioma significa pie. Cuando llegue a casa le dije al perico que estaba en la jaula: Hoy hay pieli de limón para cenar. Él muy enojado me contestó: primero, nosotros los pielis no tenemos sabores frutales; segundo no estoy en un horno; tercero hoy hay  bope, Esta vez el enojado fui yo. ¡Me había dicho  que de cenar había perro bobo! Yo me fui a mi casa y en mi computadora portátil con banda ancha investigué: pieli en periqués  significa perico; bope pie de limón.

¿Ahora comprende, señor representante de la WOFU? Por eso he venido a pedirle que nos permita hablar humanés.

-Primero, Chiqui, usted ya está hablando español, segundo, ya lo hicimos en el  64 y fue todo un caos. Para ese entonces yo tenía un restaurante. Los animales aún n hablaban completamente español, por esto lo combinaban con su idioma. Un día llegó un hámster al restaurante y lo atendió una de mis empleados extranjeros, un alemán exactamente. Cuando se acercó a darle la cuenta, el hámster le dijo: todo muy skarnidensen. Resulta que en alemán skarnidensen significa cretino y en hansterman,  delicioso. Desde ahí está prohibido que todos hablemos una misma lengua.

Fin

-¿Le gustó maestra?

-No, 0/20

-¿Por qué maestra?

-Porque mezclando español, hanstermán, periqués y perrumano, usted ha insultado a más de trece especies de ésta clase. Queda expulsado del colegio.

-Pero…

-Nada de peros ¡expulsado!

-¡Genial, ahora sí odio los idiomas!

FIN                                                                                               

 

viernes, 25 de marzo de 2011

EL LIBRO DE LAS PREGUNTAS


Trabajando con este maravilloso texto de Neruda se puede ver cuan cerca está el poeta del alma infantil y cuan similares son sus lógicas. Espero pronto publicar un mayor número de textos de los niños. Por ahora este.











PREGUNTAS DE PAOLA LIZAMA

  1. ¿Por qué el cielo es azul y no verde?
  2. ¿Por qué al día se le llama día y no noche?
  3. ¿Por qué no se duerme de día y se juega de noche?
  4. ¿Por qué las cebras no tienen rayas amarillas?
  5. ¿Por qué las flores no son a blanco y negro?
  6. ¿Por qué los peces no tienen alas?
  7. ¿Cuántos pelos hay en la cabeza?
  8. ¿Por qué las ideas vienen y van?
  9. ¿Cuántos años tiene una hora?
  10. ¿Por qué el esfero azul no raya rojo?
  11. ¿Por qué las preguntas traen más preguntas?
  12. ¿Por qué los círculos son redondos?
  13. ¿Por qué vemos con los ojos?
  14. ¿Por qué el grillo no es profesor de música?
  15. ¿Por qué el arco iris no tiene 10 colores?
  16. ¿Por qué las orugas se convierten en mariposas y no en peces?
  17. ¿Por qué el oso polar no vive en el desierto?
  18. ¿Por qué la tristeza es tristeza y no felicidad?
  19. ¿Por qué las moscas no fabrican miel?
  20. ¿Por qué un perro es un perro y no un gato?
  21. ¿Por qué el silencio no hace bulla?
  22. ¿Donde termina el arco iris?
  23. ¿Qué pasa con los sueños?
  24. ¿Qué día está entre el viernes y el sábado?
  25. ¿Por qué el mar no se casa con la arena?
  26. ¿Por qué los toros no dan leche?
  27. ¿Por qué el mar no es dulce?
  28. ¿Por qué las hojas no caen en primavera?

CLASE DE OLORES Y SABORES

Esta es una de las clases favoritas de los niños porque llevo al taller cosas deliciosas y no tan deliciosas para comer y muchas otras para oler. Ante cada olor y sabor ellos tienen que escribir un pequeño texto sobre cada sensación y luego un texto mayor sobre toda la experiencia.

Clase de olores y sabores

Alejandra Rivadeneira


Alejandra estaba en la clase que tanto le gustaba, solo que a veces sufría un poco. Y todo empezó…

Primero le pasaron unas flores de azahar, y apenas las olió su mente se nubló por completo y ella solo pudo recordar cuando su cuarto olía tan rico porque su papá le había llevado flores. Entonces volvió a la realidad y ya tenía una gran mata de cedrón en sus manos. Cuando la olió sintió que le llegaba tan adentro como cuando se te atora un caramelo y crees que el camino boca-estómago es eterno.

Cuando terminó, Alejandra sintió un olor extraño y sin darse cuenta se metió un pedazo de algo desconocido a la boca. Al principio pensó: mmmmm, sabe bien; pero luego sabía horrible como cuando te enamoras de la persona equivocada.

Luego se comió una galleta tan dulce que le recordó cuando hace calor y te metes a la piscina. Pero la felicidad no duró mucho. De repente la profe le dijo: ¡A las tres se meten todo ese pedazo de limón, uno, dos, TRES! Y Alejandra no tuvo otra opción que metérselo a la boca, era demasiado agrio como cuando te sacas una F en la prueba de mate.

Cuando acabaron eso malos momentos, llegaron más. Se comió una gran papa picante. Estaba frita. Así se sentía Alejandra cuando llegaba tarde a clase y todos la quedaban mirando, totalmente frita.

Pero todo tiene su final, cuando olió ese algodón perfumado se sintió tan feliz. Era como estar comiendo un pastel de chocolate en las nubes. Se sentía tan bien flotar. Pero todo lo que sube, tiene que bajar. Un segundo después sintió que su mundo se derrumbaba, que le daban ganas de vomitar, como cuando en el almuerzo de la escuela le servían berenjena. Se había metido un pedazo de jengibre a la boca.

Mientras pensaba en eso un olor le llegó a la nariz, era hierbabuena y le recordó cuando se enfermaba de cualquier cosa y el médico le mandaba a tomarse una agüita de eso. ¡Qué feo! La tortura china continuaba. Esta vez era una aceituna, tan fea como cuando llega un chico nuevo con cara de villano al salón de clase.

Un pepinillo no le supo tan mal y le recordó ese día que se enfermó de… bueno de algo extraño, pero no tuvo que ir a la escuela. Pero más dulce era el dulce de leche, o sea cuando tu abuelita llega de viaje con un gran peluche de regalo.

El caramelo que se comió después era duro por fuera y suave por dentro, como cuando conoces al chico nuevo con cara de villano, se ve duro por fuera y suave por dentro. Y total así siempre es la clase de olores y sabores, como un caramelo.


BUENA SUERTE, MALA SUERTE


Esta semana leímos el divertido libro de Keiko Kasa MI DíA DE SUERTE, de la Colección Buenas Noches de Editorial Norma. Luego de la lectura los niños escribieron historias sobre el tema Buena suerte, mala suerte.

BUENA SUERTE, MALA SUERTE


Vanessa Salinas CH

El día Lunes

El día lunes fui a la escuela muy atrasada, estaba muy triste porque es muy feo no llegar a tiempo.

Cuando llegué, nadie estaba en la escuela, creí que no me esperaron y se fueron a otra parte aunque yo era la presidenta. Pensé que me dejaron.

Entonces, me di cuenta que un perro lobo había entrado a mi escuela y había mordido a unos niños, el perro lobo se había ido lejos muy lejos . Que buena suerte tuve que a mi no me mordió.

El día sábado

El cumpleaños de mi amiga es hoy y no tengo preparado el regalo, ¿y ahora que haré si todo está cerrado? Me puse muy desesperada así que tiré todas las cosas de mi baúl y no encontré nada.

El cumpleaños era a las seis y ya eran las cuatro y no tenía nada, saque de todos los cajones de la casa.

Al fin encontré un oso de peluche muy bonito y cosí una camiseta rápido con una letra de su nombre .

Ya son las 6 así que lo empaqué rápido en una caja de regalo y me fui en un super auto y llegué a la mitad de la fiesta, me perdí la parte divertida y me sentí muy triste . ¡Qué mala suerte!



CON UNA TRAVIESA RAYA


Esta semana leímos el libro ES UNA TRAVIESA RAYA del Fondo de Cultura Económica que resultó muy motivador para que los niños escribieran sus historias.


MI RAYA


Alejandra Rivadeneira


-Ahh!- Gritó la raya

-Ahh!- Grité yo

-Ahh! Grito mi profe de mate-¡QUIEN QUIERA QUE SEA EL RESPONSABLE QUIERO QUE ATRAPE A ESA RAYA!!!!!!!

Pero fue muy tarde, mi raya se había ido muy, muy lejos y se la veía en el horizonte

-¿Quién dibujo esa raya? –pregunto mi profe.

Yo alce tímidamente la mano, ella me miro con sus malignos ojos, yo me puse roja como un tomate, ella iba a decir algo pero la puerta se abrió de golpe.

Era el profe de educación física y tenía mi raya en la mano. Ahora si estaba en problemas. Seguramente me mandaría a darme diez vueltas a la cancha de bascket. Yo me cansaría en la segunda vuelta y me bajarían tres puntos en conducta. Llamarían a mis padres y tendría un castigo eterno como mi raya. Y estaba en lo cierto, bueno, casi. Empecé a correr y correr y me empecé a cansar. Cuando de pronto sentí que algo topaba mi espalda. Era mi raya que me dibujaba y me ayudaba a volar.

Acabé las diez vueltas y ella se fue. Nadie sabe a donde pero nos dejo unos regalitos, como un bigote en la profe de bascket dos cuernos en la de mate y un cero en mi cuaderno.


Una raya traviesa


Vanessa Salinas CH

Yo tengo una raya que es silenciosa, traviesa y curiosa, pasa afuera y adentro de mi habitación, se divierte mucho.

Se va al bosque y recorre las plantas y árboles, escucha a las ranas croar.

Un día se fue a un mundo mágico donde los árboles son de muchos colores, recorre casitas de estrellas.

Al final regresó al cuaderno recorriendo el bosque.


SOBRE NUBES Y NUBARRONES


Esta semana trabajamos con el libro CON LA CABEZA EN LAS NUBES, de Pequeño Editor de Argentina. Leímos y vimos el libro y luego salimos al patio a buscar figuras en las nubes de un cielo de Quito que ese día estaba muy nublado. Luego los niños escribieron sobre lo que las nubes les contaron.





EL GRAN OSO

Alejandra Ribadeneira

Todo empezó cuando a la Leo se le ocurrió que quería ver las nubes. Nos sacó al patio y todos empezamos a buscar formas. Me acomodé en el piso y miré algunas nubes, entonces vi una con la forma perfecta de un oso. La quedé observando cuando de repente se acerco a mí. Creí que era solo mi imaginación, pero en un momento sentí unas algodonosas garras que me cogían y me elevaban. Grité con todas mis fuerzas pero estaba demasiado alto para que me oyeran.

Entonces salté de las garras de ese oso y empecé a caer y caer. Habían montones de nubes. Creía que algún día llegaría a la tierra, pero no. En un momento me encontré otra vez en las garras de oso. No me sentía bien. Poco a poco me fui haciendo blanca y blandita. Me estaba convirtiendo en una de ellos.

Sabía que debía huir…

Me libré de las garras una vez más y mientras corría desprendía pedazos de nube de mi cuerpo, pero ellos no querían que me fuera. Me agarraron un montón de patitas y…

Me desperté en mi cama, pero al lado del velador, estaba el gran oso, esperándome…


Lo que pasa si se mezcla imaginación

con un poco de nube


Valentina Poveda


Salí al parque. Había nubes y nubes juntas. Encontré varias cosas, pero la que más me llamó la atención fue un oso amenazante, un elefante tuerto y el perfil de un hombre. Me puse a imaginar una historia, como qué pasaría si el oso fuera osa, el elefante, elefanta y el hombre… si fuera mujer sería todo aburrido, pasaría lo mismo con todos, así que se queda como hombre. Si eso pasara, me llevarían a la cárcel de nubes, convertida en una que primero se presentaría como neblina, luego subiría y no me dejarían volar por confundirlos y me encerrarían. Tras unos días me dejarían salir, pero con la condición de no decir nada a los humanos. Me bajarían otra vez y yo no me podría resistir de contar lo sucedido, así que me volverían a capturar. Por suerte, los humanos no creerían lo que les contaría, pero me quedaría eternamente como nube. Otra posibilidad es que al descubrir lo que realmente son, se conviertan, el oso en un oso, el elefante, en elefante y el hombre… bueno, ya lo saben. Entonces me agradecerían, menos el elefante, que le gustaba ser pequeño en el cielo y volar, sin miedo de cruzarse con un ratón. El elefante se enfadaría conmigo y querría aplastarme. Yo correría sin parar. Entonces el hombre y el oso me rescatarían y tratarían de hacer razonar al elefante, que no les haría caso y trataría de volar. Su novia lo cogería y lo subiría de vuelta al cielo. Y acabaría todo con el típico ¨y todos vivieron felices para siempre¨ pero yo no lo quiero. Así que el oso y el hombre extrañarían su hogar y querrían regresar. No podrían hacerlo, pues ya había pasado demasiado tiempo. Entonces romperían la ley y los subirían por traidores a su propia ley. Entonces así lograrían subir, pero siendo traidores. Pero, ¿qué pasaría si el oso, el elefante y el hombre fueran enemigos, todos miembros de la asamblea de las nubes? Quizá harían una guerra y yo la debería detener, porque sería la presidenta de la Embajada de las nubes en la Tierra, encargada de resolver sus problemas. Entonces trataría de hacerlos amigos, pero no lo lograría, así que los separaría y todo acabaría bien.

CREANDO MONSTRUOS


Esta semana leímos el cuento EL MONSTRUO QUE SE COMIÓ LA OSCURIDAD, luego de lo cual cada niño y niña creó su propio monstruos y luego escribió una historia con él como protagonista.

Nombre común: Lápiz peludo

Nombre científico: Arácnidus osus

Valentina Poveda C.

Tiene la forma de un lápiz, aunque el profesor de ciencia dice que tiene forma de una casa. Tiene cuatro piernas peludas y un solo pie con garras a ambos lados. Posee dos manos redondeadas y pequeñas, también con garras. Tiene dos orejas de oso y tres pelos azules. Posee una sola ceja y dos ojos grandes. Se ve una pequeña nariz de cerdo arriba de una boca de conejo, o de perro, o de gato, o, como su nombre científico lo dice, de oso.

Es muy preciado, porque su pelo y garras tienen propiedades sanadoras. Están en peligro de extinción. Su carne no es comestible. (Recuérdenlo, por si se lo encuentran en el desierto, enterrado en la arena, como yo.)

El proceso para sacar las garras y el pelo es muy difícil. Se lo debe dormir metiéndole un cactus en la oreja y arrancar el pelo y las garras con una pinza. La mayoría muere, pues el cactus le llega al tímpano, que está conectado al pulmón y ayuda a su funcionamiento.

Tiene el poder de desmayar a las abuelas de más de 90 años. Puede vivir hasta 53 años. Se desplaza saltando. Mide de un metro a un metro con cincuenta centímetros.

Estoy sentado en el desierto. Siento un movimiento debajo de mí. Cavo. Quiero saber qué es. Cuatro patas peludas y un pie con garras. Cavo más. Un cuerpo con forma de lápiz, ¿o era de casa? Tres pelos azules. ¿Qué es? Algún invento científico fallido. Se vuelve a enterrar. ¡Excelente! ¡Un auto!

- Señor… ¡Suba!

¡Qué alegría! ¡Alguien llegó a rescatarme! Nos vamos. Regresan a ver.

- Definitivamente no valía la pena. Esa criatura merece vivir.

EL MUNDO AL QUE VIENES


Después de la lectura de este precioso libro los niños escribieron una carta a una niña que estaba cercana a nacer.


CARTA

Alejandra Rivadeneira


Querida niña que aún no conozco:

En esta carta te daré 7 razones por las que es bonito vivir:

º Te comerás un helado todos los sábados.

º Porque alguien te puede dar un abrazo.

º Habrá grandes amigos con quienes jugar.

º En montañas rusas podrás gritar y romperle el tímpano a tu papá.

º Porque cuando venga el Cuco serás mas fuerte que él y lo desaparecerás en el olvido.

º Porque en los recreos puedes salir volando del columpio.

º Porque alguien siempre te estará guardando en su corazón

¿Sabes algo? El tiempo corre muy rápido por eso tienes que aprovecharlo y vivir feliz. Solo tienes permiso de llorar cuando se te caiga el helado al piso, no por ninguna otra estupidez.

Tienes permiso de odiarle a la profe de mate, sacarte F en pruebas olvidarte la regla.

Comerte solo las papas y no las espinacas.

Y sobre todo recuerda que todos TE QUEREMOS MUCHO.


Carta


Valentina Poveda

Te contaré por qué es bonita la vida, yo sé que eres muy pequeña, así que trataré de no usar términos difíciles, y si eso pasa, te los traduciré. Términos: palabras. Bueno, vamos al grano. La vida es bonita, porque podrás ver maravillosos animales bonitos por doquier, árboles verdes, o simplemente sus troncos, desnudos, pero de alguna forma interesantes, plantas de toda clase… en fin. No podré enumerar tantas cosas, así que pasemos a los problemas. ¡Ah! Doquier: cualquier lado. Irás a la escuela, te parecerá algo inútil, pero sirve, sino ¿cómo leerás algún día esta carta? y ¿cómo la contestarás? y dime ¿cómo sabrás darle el vuelto al señor que compró en tu tienda? y si los tienes ¿cómo revisarás a tus hijos los deberes? ¿Y si llega un extranjero a tu tienda y no sabes inglés? ¿Cómo explicarás a tus hijos el por qué de los terremotos? ¿Cómo responderás la pregunta de tus sobrinos acerca de qué es una célula? Por eso la escuela sirve para solucionar problemas y no te debes preocupar ni odiarla, aunque todo salga mal. Las pesadillas, solo cuéntaselas a alguien y te consolará. Si tienes miedo alguna vez, respira hondo y busca el chocolate de la abuela. Cómelo despacio y avísale antes a tu madre que lo vas a hacer, porque sino creerá que estás comiendo la porquería del perro. No te aflijas nunca, porque todo, absolutamente todo tiene solución, menos la muerte, ¡Sé feliz!

Atentamente

El abuelo José

PD: Cuando nazcas, esta carta será una antigüedad, recuerda que la escribí en 1930 y no me digas que soy desactualizado, porque no sé nada acerca de ese tal e-mail.